El ascensor Espíritu Santo fue inaugurado el 11 de septiembre de 1911 y conecta el plan de Valparaíso con el cerro Bellavista, además de comunicar con el Museo a Cielo Abierto desde la calle Aldunate en la Plaza Victoria. Lleva ese nombre debido a su cercanía con la extinta iglesia del Espíritu Santo, demolida en 1972.